EL SEÑOR DE LOZANILLOS

Ideas, testimonio, humor y reflexiones para que las piedras del camino sean escalones y no obstáculos.
Para PASARLO BIEN HACIENDO EL BIEN

jueves, 20 de octubre de 2011

Otra vez MARÍA

Hola a todos.


Después de unos meses sin escribir, vuelvo a la tarea... reemprendida con tanto afán como poco lucimiento, como diría el Dr. Gallardo, mi profe de matemáticas de 3º de BUP (uff, qué lejano suena eso...)

Y qué mejor forma de VOLVEEEER que con una receta mariana:

"CÓMO AMAR MÁS Y MEJOR A TU MADRE EN TRES PASOS"

¿Te atreves? Vamos a ello.

PASO 1.

Lee con calma este texto:


María, María, María,
ya la noche se adentra,
María, María,
y unas sombras perversas 
y hambrientas se acercan
a reírse de mí.
Me miran, me estudian, me acechan,
pero duermo tranquilo,
ya nada me inquieta
porque sé que mi madre,
mi madre María,
no se aparta de mí.
María, por siempre María,
que la tierra te cante, 
María, María,
la fiesta se alargue,
la música arranque,
que haya danzas por ti.
Son gracias, aplausos y vivas
lo que hoy sólo se escucha
por to’as las esquinas,
porque México entero
te trae serenata 
y te canta así.
María, María, María,
Dios te salve María,
María, María,
llena eres de gracia,
bendita, bendita,
bendita eres tú.
Bendita entre las mujeres 
y bendito es el fruto 
de paz de tu vientre,
el amor infinito,
la luz de la vida,
nuestro hermano, Jesús.
María, María, María,
para siempre la Virgen,
la santa valiente,
una mejor amiga,
una madre más linda
no te irás a encontrar.

Leal, poderosa, piadosa,
es así de gloriosa
nuestra reina preciosa,
por eso es que México
te trae serenata
y te canta así.
María, María, María,
viva la morenita,
la virgen bonita,
viva la mexicana,
la guadalupana, 
la reina de la paz.
La causa de nuestra alegría,
reina de la familia,
lucero del alba,
salvación de las almas,
la mística rosa,
nos confiamos a ti.
Me escucha, me mira, me entiende,
me sonríe paciente,
impróvidamente,
me regala un consejo,
me besa la frente
y me saca a vivir.
María, María, María
cuando estaba yo lejos,
María, María,
cuando andaba perdido,
en grave peligro,
tú saliste por mí.
Y ahora son tantas las cosas bonitas 
que hemos ido cruzando 
en este tren de la vida
y no sé cómo decirte,
cómo agradecerte
lo que has hecho por mí.

María...



PASO 2.

Sube bien el volumen del ordenador, dale al Play, cierra los ojos y escucha con el corazón.


PASO 3.

Ahora, vuelve a darle al PLAY y relee el PASO 1 a medida que suena la canción.


Hala, ya está.

Ahora, quien quiera... que ponga su comentario, compartiendo lo que experimentó.